El FC Barcelona sigue empeñado en reforzar su parcela ofensiva con un extremo izquierdo de nivel top que pueda complementar y dar alternativas al juego del equipo. Aunque en un primer momento parecía que el club blaugrana tenía claro su objetivo, la negociación por este fichaje se está complicando más de lo esperado.
Según la información recogida, una de las principales apuestas del Barça para este puesto era Khvicha Kvaratskhelia, la estrella del Nápoles que ha deslumbrado en la Serie A en los últimos meses. Sin embargo, el cuadro catalán baraja otras alternativas, entre las que destaca el nombre de Nico Williams, el joven delantero del Athletic Club.
El objetivo sería incorporar a un jugador que, pese a no atravesar su mejor campaña hasta el momento, podría convertirse en un refuerzo estelar para el Barça, formando una potente pareja de extremos explosivos junto a la estrella de la cantera Lamine Yamal.
No obstante, esta negociación no parece estar siendo nada sencilla. Y es que, si bien el coste del traspaso no supondría un gran obstáculo, pues su cláusula de rescisión ronda los 65 millones de euros, el principal escollo radica en las exigencias salariales del propio Williams.
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El delantero percibe actualmente en el Athletic Club alrededor de 5 millones de euros netos anuales, siendo el segundo jugador mejor remunerado de la plantilla tras su hermano Iñaki. Ahora, se especula con que Nico podría demandar un importante incremento salarial si decide asumir un nuevo reto fuera de San Mamés, situando sus emolumentos entre los 8 y 9 millones de euros netos por temporada.
Esta exigencia salarial por parte del jugador podría generar cierto "recelo" en el seno del Barcelona, que tradicionalmente ha tratado de mantener un férreo control sobre su masa salarial. No obstante, otros clubes con mayor capacidad económica podrían estar más dispuestos a satisfacer las demandas de Nico Williams.
De este modo, el principal obstáculo que encuentra en estos momentos el Barcelona para fichar a su objetivo top en la posición de extremo izquierdo parece ser precisamente la elevada exigencia salarial de Nico Williams. Una situación que, de no llegar a un acuerdo, podría decantar la balanza hacia otros equipos que estén dispuestos a asumir esas condiciones económicas. ¿Qué sucederá?
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