La renovación de Ousmane Dembélé se ha convertido en una de las principales prioridades del FC Barcelona en los próximos meses. El talentoso extremo francés ha despertado el interés de varios equipos europeos de élite debido a su impresionante rendimiento en gran parte de la temporada, a pesar de haber estado lesionado en las últimas semanas.
Aunque existe ese interés por renovar su contrato, el Culé planea esperar hasta el final de la temporada para sentarse con el agente y el jugador y discutir la posibilidad de extender su contrato más allá del 30 de junio de 2024.
Se espera que Dembélé reciba una mejora salarial y una ampliación de tres temporadas, y el club confía en recibir una respuesta positiva por parte del delantero.
Sin embargo, en caso de una negativa, el Barcelona estaría dispuesto a aprovechar el gran valor de mercado que tiene actualmente en las principales ligas europeas y buscar su traspaso para recuperar parte de los 130 millones de euros invertidos en su fichaje.
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El Blaugrana quiere evitar otro culebrón y enfrenta el desafío de la cláusula de rescisión de Dembélé, que es de tan solo 50 millones de euros. Por esta razón, el club catalán busca renovar las condiciones contractuales del jugador para evitar que otros equipos se hagan con él a bajo costo.
Dembélé ha tenido su mejor temporada como azulgrana, disputando 33 partidos en los que ha marcado ocho goles y repartido siete asistencias.
La renovación del francés es crucial para el Barcelona, ya que el club confía en el talento y el potencial del extremo. Esperan asegurar su continuidad y seguir contando con su aporte en el equipo. Los próximos meses serán determinantes para conocer el desenlace de esta negociación y si Dembélé continuará defendiendo los colores azulgranas en los próximos años.
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