El Real Madrid sumó una victoria vital ante el Olympiacos que permite al equipo de Xabi Alonso recuperar el pulso en la competición. Los blancos necesitaban imperiosamente esos tres puntos para apaciguar las tensiones internas y reencontrarse con el triunfo, y lo lograron en un encuentro que, aunque no exento de complicaciones, dejó momentos para la celebración. ⚽
Kylian Mbappé se erigió como el absoluto protagonista al firmar un póker de goles que catapultó a su conjunto hacia el éxito. Cada tanto del francés fue un mazazo para los rivales, demostrando por qué es una de las mayores estrellas del planeta. Junto a él, Vinicius desplegó un nivel altísimo que ilusiona a la parroquia madridista.
Las estrellas brillan en la noche europea
El brasileño Vinicius, con su '7' en la espalda, protagonizó una actuación soberbia llena de regates imposibles y asistencias clave que facilitaron el camino de su compañero. Su energía y desequilibrio fueron el motor de un Madrid que buscaba redimirse tras tropiezos previos.
Sin embargo, más allá de estos dos cracks, el partido dejó sensaciones agridulces. El dominio no fue tan aplastante como cabía esperar, y surgieron interrogantes sobre el resto de la plantilla en un choque que se preveía dominante desde el pitido inicial.
La decepción que empaña la fiesta
Dani Ceballos se convirtió en el gran señalado tras saltar al césped en la segunda mitad contra el Olympiacos. El centrocampista de Utrera no logró estar a la altura de lo que demandaba el momento, evidenciando carencias en su rendimiento que no pasaron desapercibidas para nadie. 😔
La afición no tardó en criticarlo, y con razón: su aportación fue mínima en un instante crucial del partido. Para colmo, el domingo anterior fue titular en el Martínez Valero y tampoco cuajó un partido memorable, desperdiciando la confianza depositada por Xabi Alonso.
Xabi Alonso y la paciencia al límite
El técnico de Tolosa parece mostrar signos de frustración con este mediocentro, que por diversos motivos no termina de despegar. A pesar de las oportunidades, Ceballos no responde con la consistencia que el esquema del Madrid requiere en la medular.
El staff técnico subraya la importancia de que todos los jugadores rindan al máximo dada la densidad de compromisos, pero el utrerano aún no ha dado el paso adelante necesario. Esta situación genera preocupación en un equipo que aspira a todo en múltiples frentes.
¿Qué futuro le espera a Ceballos?
Con contrato en vigor hasta 2027, el panorama para Dani Ceballos podría complicarse si no invierte la tendencia. Queda una larga temporada por delante, pero su rol en el equipo corre el riesgo de menguar progresivamente ante la feroz competencia interna.
El pasado verano estuvo a un paso de recalar en el Olympique de Marsella, rompiendo un acuerdo que parecía cerrado. Ahora, el próximo mercado invernal o veraniego podría traer novedades, dependiendo de cómo evolucione su forma en los próximos meses.




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