En una emocionante vuelta de tuerca en el caso Mbappé, Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, ha logrado superar el obstáculo más importante que impedía el fichaje del delantero francés. Se trata de los derechos de imagen, un tema sensible que ha generado tensiones entre el club y el entorno del jugador.
Hasta ahora, la madre del goleador, Fayza Lamari, se mostraba inflexible en cuanto a los beneficios generados por los derechos de imagen de su hijo. Buscaba asegurarse de que el 100% de las ganancias fueran a parar a su bolsillo. Esta postura había sido un obstáculo insalvable para el Real Madrid en su intento de fichar al talentoso futbolista.
Sin embargo, Florentino Pérez ha demostrado su determinación y flexibilidad al ceder en este punto clave. Según informes recientes, el club blanco ha reconsiderado su postura y estaría dispuesto a aceptar el control total por parte del entorno de Mbappé en la gestión de sus derechos de imagen.
Aunque el Real Madrid ha mantenido históricamente una política de exigir el 50% de los beneficios generados por los derechos de imagen de sus jugadores, en el caso de Mbappé, Florentino Pérez está dispuesto a hacer una excepción. El presidente del club aceptaría recibir solo el 25% de esos ingresos, mostrando así una señal de buena voluntad y facilitando el acuerdo.
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Esta decisión no solo busca allanar el camino para la firma del contrato, evitando resistencias por parte del entorno de Mbappé, sino que también tiene un impacto positivo en la estructura salarial del Real Madrid. Al reducir los ingresos relacionados con los derechos de imagen, el club puede equilibrar los gastos y evitar una brecha salarial excesiva en su plantilla.
Si bien Mbappé seguiría recibiendo un salario superior al de algunos de sus compañeros, la diferencia no sería tan abrumadora como inicialmente se planteó. Esto demuestra la voluntad de Florentino Pérez de mantener un equilibrio financiero y adaptarse a la política económica actual del club.
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