Rodrygo Goes ha sido uno de los nombres propios en el Real Madrid en las últimas fechas, aunque no precisamente por sus actuaciones sobre el terreno de juego. El brasileño ha acaparado portadas al realizar unas controvertidas declaraciones previo a la final de Champions que no han sentado nada bien en la directiva blanca.
En ese momento, el atacante había afirmado "sí, bueno, todo puede pasar. Tengo contrato aquí, pero los años que he estado aquí fueron un placer para mí". Y, ante una repregunta de la periodista, continuó: "No. Como he dicho, yo siempre quiero estar en este club, pero a ver".
Según ha podido saber este medio, estas palabras de Rodrygo han molestado en la entidad presidida por Florentino Pérez, que ve en ellas un claro intento de presionar para tener más minutos tras la llegada de refuerzos de relumbrón. Esto, sumado a rumores sobre su malestar, han llevado al Madrid a tomar una drástica decisión.
Los dirigentes merengues habrían optado por ponerle un precio de salida al internacional brasileño, cifrado en torno a los 150 millones de euros. Cifra que pretende satisfacer el deseo blanco de usar ese dinero para ir a por Erling Haaland, el 'objetivo número 1' para reforzar la delantera.
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Varios clubes como Liverpool o Manchester City estarían atentos a la situación de Goes, dispuestos a realizar una fuerte inversión por el atacante. No obstante, el Madrid solo se desprenderá de él por una oferta irrechazable dadas sus condiciones.
Se abre así un nuevo escenario en la carrera de Rodrygo, que debe replantearse su futuro tras sus palabras o correr el riesgo de acabar saliendo del club de sus amores el próximo verano. Todo queda en el aire a la espera de que el mercado hable.
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