🎉 ¡El Real Madrid no se detiene! Mientras todos hablan de la posible llegada de Kylian Mbappé, el club blanco ya está moviendo hilos para fortalecer una de sus posiciones más importantes: la defensa. El objetivo es claro: construir un muro inexpugnable para los próximos años.
La defensa, prioridad silenciosa
A pesar del interés en los grandes nombres del ataque, los responsables deportivos del Real Madrid entienden que una base sólida en la zaga es fundamental para competir al máximo nivel. Por eso, han puesto sus ojos en dos centrales de primer nivel que podrían llegar al Santiago Bernabéu en los próximos mercados de fichajes. Se trata de una inversión ambiciosa que refleja la ambición del club.
Y es que el conjunto merengue ha fijado un presupuesto de nada menos que 150 millones de euros para reforzar su línea defensiva. Los nombres en la lista son dos franceses que están destacando en la escena europea: William Saliba, actualmente en las filas del Arsenal, e Ibrahima Konaté, defensa del Liverpool. La apuesta es por juventud, talento y potencial, cualidades que encajan a la perfección con la filosofía del club.
Konaté, la opción más accesible
La llegada de Konaté se considera la más factible a corto plazo. Su contrato con el Liverpool finaliza en 2026, lo que podría obligar al club inglés a escuchar ofertas para evitar su marcha gratuita. El Real Madrid podría presentar una oferta en los próximos meses, rondando los 50 millones de euros, o esperar al último año de su contrato para negociar su incorporación como agente libre. El perfil del futbolista, potente y rápido, encaja a la perfección en el esquema táctico que pretende implementar el cuerpo técnico.
Saliba, el sueño de Florentino 🤩
Por otro lado, William Saliba representa una operación más compleja. Con contrato hasta 2027 con el Arsenal, el club londinense no está dispuesto a dejarle salir por menos de 100 millones de euros. A pesar del alto coste, Florentino Pérez considera a Saliba como una pieza fundamental para completar una defensa de élite, junto a Dean Huijsen, el joven central que ya ha demostrado su valía en el primer equipo.
El plan es claro: conformar una línea de tres centrales sólida y versátil, capaz de adaptarse a diferentes estilos de juego. A esto se sumaría la proyección de dos carrileros de primer nivel, como Alexander-Arnold y Álvaro Carreras, para completar un sistema defensivo que garantice seguridad y equilibrio al equipo. El Real Madrid mira al futuro y apuesta por una defensa de hierro.
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