El conjunto azulgrana cerró una semana de ensueño al endosar un contundente 4-1 al Bayern Múnich y un histórico 0-4 al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Dos colosos a los que dominó mostrando un fútbol vistoso y efectivo que ha puesto al Barça en la elite del Viejo Continente.
Todo comenzó el pasado miércoles cuando los culés recibieron al actual subcampeón de la Bundesliga en el Camp Nou. Rápido, veloz y efectivo, el cuadro de Hansi Flick se adelantó a los 60 segundos con un tanto de Raphinha y, aunque Kane empató, remontó antes del descanso gracias a Lewandowski y un segundo del brasileño.
El partido dejó buenas sensaciones en el barcelonismo aunque, contra todo pronóstico, el mejor encuentro estaba por llegar. El Clásico del domingo en el Bernabéu era la prueba de fuego para medir el potencial de este Barça y la respuesta superó cualquier pronóstico.
Tras un primer tiempo igualado, el conjunto culé emergió como un huracán en la reanudación. Lewandowski, que lleva 13 goles en 11 partidos, abrió la lata para que Yamal y un doblete de Raphinha cerraran un histórico 0-4 que silenció Chamartín.
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Dos goleadas en apenas cuatro días que sitúan al Barça como principal aspirante no solo a reinar en España, sino a conquistar nuevamente Europa. El sextete parece una meta real si el equipo mantiene este nivel ante los grandes. Flick ha logrado dotarle de una solidez, contundencia y variedad ofensiva que amenaza con reinar en el Viejo Continente.
Con el Bayern y el Real Madrid como principales víctimas, el Barça ha mandado un mensaje inequívoco a los grandes de Europa: ha vuelto y opta a todo. Solo el tiempo dirá si este equipo puede volver a repetir las hazañas de Guardiola y Luis Enrique, pero su fútbol y resultados colocan al conjunto azulgrana como el mejor equipo del continente en este inicio de temporada.
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