La noticia de la salida de Sergio Busquets del FC Barcelona ha dejado un vacío enorme en la plantilla culé. El capitán español, muy querido en el club, ha decidido no renovar su contrato, que expira al final de esta temporada. El centrocampista no ha aceptado la oferta de la directiva, que implicaba percibir casi la mitad de su salario actual.
Sin embargo, hay un aspecto positivo para el Blaugrana, y es que la partida de Busquets significa que su contrato ya no formará parte de la masa salarial del equipo para la próxima temporada.
Ahora, el club se enfrenta al desafío de entablar conversaciones con algunos jugadores de la plantilla para plantearles una rebaja salarial o incluso considerar la venta de aquellos que puedan generar un gran beneficio económico, como Ansu Fati, Raphinha o Ferran Torres.
El gran interrogante es quién será el reemplazante de Busquets en el centro del campo. La directiva del Barcelona tiene varios nombres en mente, pero uno de los que más agrada es el de Martín Zubimendi, el talentoso centrocampista de la Real Sociedad. No obstante, hay un problema que dificulta la posible contratación de Zubimendi por parte de los culés: su precio.
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El español ha cautivado a Xavi desde hace tiempo. El exjugador ve en el joven futbolista un gran potencial y unas condiciones muy similares a las de Busi. No obstante, su elevado valor de mercado, estimado en 60 millones de euros, resulta excesivo para Joan Laporta, presidente del Barcelona.
Aunque el entrenador está encantado con la idea de contar con Zubimendi en su equipo, Laporta tiene dudas y no está de acuerdo con desembolsar una cantidad tan alta por el mediocentro.
Además, la reciente renovación con la Real Sociedad, que lo mantiene vinculado al club vasco hasta 2027, complica aún más la operación debido a los problemas económicos que enfrenta el Barcelona.
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